"Lo vamos a suspender de momento porque en este desembarco hemos visto que no es una necesidad prioritaria, nos preocupan otras muchas cosas en el incio de la temporada en la Liga Profesioanl y sobre todo atendiendo a que en la asamblea hubo un veinte por ciento de socios a los que no les pareció bien. Por lo menos, vamos a reflexionarlo un poco más", comentó el vicepresidente del club, Ángel Fernández de Aránguiz.
La Directiva ha preferido solucionar los problemas actuales, referentes a los avales y a los pagos que tiene que hacer el club. Unas exigencias marcadas por la Liga de Fútbol Profesional y que si no se cumplen provocarían el descenso, automático, del club.
Un hecho que le ha sucedido al Orihuela Club de Fútbol que, al no poder hacer frente al aval, baja a la Tercera División.
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